Comisión Franceschini
La LPHE entiende que el Patrimonio español está formado por “los inmuebles y objetos muebles de interés artístico, histórico, paleontológico, arqueológico, etnográfico, científico o técnico. También forman parte del mismo el patrimonio documental y bibliográfico, los yacimientos y zonas arqueológicas, así como los sitios naturales, jardines y parques, que tengan valor artístico, histórico o antropológico”.
Esta concepción del Patrimonio en sentido amplio viene especialmente influenciado por las conclusiones de la Comisión Franceschini (1964), en las que se acuñó un nuevo concepto de “bienes culturales”, cuyo conjunto conforma el Patrimonio Cultural, y que se definen como todos aquellos “bienes de interés arqueológico, histórico, artístico, ambiental y paisajístico, archivístico y bibliográfico, y cualquier otro bien que constituya testimonio material dotado de valor de civilización (…) Pertenecen al Patrimonio Cultural de la nación todos los bienes que hagan referencia a la historia de la civilización”.
La Comisión Franceschini fue creada en Italia en 1964 con el fin de evaluar el estado del maltrecho Patrimonio Histórico italiano y sus conclusiones debían conducir a la adopción de medidas concretas que permitieran garantizar su conservación y disfrute futuros. El nombre deriva del diputado demócrata-cristiano que la presidió, Francesco Franceschini; y el objetivo de la Comisión fue el de diseñar un concepto de Patrimonio Cultural que permitiera al legislador concretar el objeto de la tutela por parte de la nueva ley protectora que se redactaría a continuación.